En medio de la crisis económica que azota a la mayor parte de los países de Europa, especialmente los mediterráneos y en momentos en los cuales la economía del “Primer Mundo” se plantea muchos retos y desafíos, fuertes corrientes atraen de nuevo a los Europeos a Asia y América. Especialmente en América donde muchas de las economías de los países de Latinoamérica se ha saneado y están fortalecidas, gobiernos y países Europeos se aproximan a “abrir la puerta” y “ofrecer oportunidades” a países americanos.

Muchas veces a lo largo de la historia y siempre durante sus crisis y hambrunas Europa hace maletas y emprende el vuelo hacia América para buscar alimento para su supervivencia y es que ya lo hemos visto tantas veces a lo largo de la historia que parece increíble que no lo conozcamos ya de memoria. Los tratados de libre comercio que se han ido firmando entre latinoamérica y Europa son la nueva carta blanca al colonialismo, la explotación y el saqueo que históricamente se han realizado. Hoy son las empresas, las exportaciones, las privatizaciones y los acuerdos los que ademas legalizan estos abusos.

Aprenderemos los Americanos a darnos cuenta que Europa no tiene otra abundancia y riqueza que la que obtiene alrededor del mundo? Entenderemos que su capital esta en la astucia, audacia y capacidad de someter (a la fuerza o nó) a otras civilizaciones del planeta para hacernos pensar que son mas avanzados, mas civilizados y superiores y de esta manera obtener todo lo que les entregamos con una sonrisa? han devuelto, compensado o equilibrado este saqueo histórico en alguna medida?

La imágen de Angela Merkel y otros dirigentes Europeos visitando Chile me evoca fuertemente aquellos grabados y pinturas de desembarcos de conquistadores en tierrras americanas y de masacres a los pueblos americanos por el oro y las piedras preciosas. Cobrando sobre la riqueza ajena y llevando a casa los mas exquisitos tesoros para construir palacios, iglesias y desarrollar su mundo.

A lo mejor es el momento de dejar de creer en los antiguos órdenes y jerarquias del mundo y pensar en nuevos ordenamientos y relaciones, tal como lo ha hecho Asia y como lo comienza a hacer India. Queda la pregunta sobre si lograremos conectar las imágenes y entender que cuando no hay crisis nos impiden entrar en sus países, nos niegan la cooperación, nos generan deuda externa y nos imponen regulaciones y reglas que nunca son equitativas. valdría la pena pensar, en que condiciones compartimos o negociamos nuestras riquezas.